ESCUELA BÍBLICA, DOMINCAL
DEPARTAMENTO DE EDUCACIÓN
Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí. S. Juan 5:39 (RV60)
Cuarta lección
El esposo y la esposa, sus roles
Versiculo para memorizar: "No os unáis en yugo desigual con los incrédulos, porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión, la luz con las tinieblas?" (2 Corintios 6:14)
Enseñanza Bíblica
Aun cuando no hemos dimensionado el problema, el divorcio es una práctica creciente tanto en matrimonios católicos como evangélicos. Los problemas, apenas previsibles en cualquier relación, se convierten en el detonante que utilizan los componentes de la pareja para desencadenar aires de separación. Pareciera que la consideran la única opción, desconociendo que las diferencias están dentro de los probable, pueden resolverse con el diálogo y si, aún así persisten, con la intervención de Dios.
En la Biblia encontramos definidos los roles que debe desempeñar cada uno de los integrantes del hogar. Y es importante que cada cual reconozca la responsabilidad que tiene con su cónyuge como también, el papel que tiene en la vida. Nos unimos en matrimonio no solamente para ser felices sino para "esforzarnos" por hacer felices a nuestro esposo o esposa.
Dios no depositó en el esposo responsabilidades que no pudiera cumplir y de igual manera, tiene en cuenta la constitución física y emocional de la mujer para atender su compromiso al interior de la familia, como madre y como esposa.
1.- Amor y sometimiento
En las Escrituras hallamos la guía que necesitamos para asegurar que la relación matrimonial será sólida, hallará la salida a las dificultades que enfrenta y generará las condiciones propicias para la crianza de los hijos.
El primer texto que les invitamos a considerar, se encuentra en Efesios 5:21-30. Léalo y medítelo con detenimiento. En el texto encontramos claramente que:
a) El sometimiento muto de los cónyuges, agrada a Dios.
b) El marido debe amar a la mujer, mientras que ésta debe estar sujeta a su marido.
Desde el momento en que no queremos admitir que hay responsabilidades que debemos cumplir como cónyuges, enfrentamos serias dificultades que generan desesperanza y desasosiego en la relación.
2.- Dios reafirma la prelación de la autoridad.
Una joven mujer que me visitó en la oficina, estaba furibunda. Argumentaba que no hallaba motivo para sujetarse a su marido. "Estamos en la era de la liberación femenina", argumento. Y Biblia en mano estudiamos que la sujeción, quiéralo o no, era parte de la autoridad que tenía su marido y que –de acuerdo con la voluntad de Dios—no se podía ni debía pasar por alto.
Un pasaje revelador lo hallamos en 1 Pedro 3:1, 2. En él descubrimos dos elementos importantes:
a) La sujeción de la mujer está en el plan de Dios. Aceptar la autoridad de su marido una forma de testimoniar de la fe.
b) El esposo debe vivir con sabiduría con su esposa. Esto implica brindarle un trato amoroso y considerado.
Cuando reconocemos los roles de cada uno, y respetamos los niveles de autoridad, sin duda se producirán condiciones propicias para la relación matrimonial.
¿Hay excepción para que la mujer no se sujete? Solamente cuando está siendo sometida a actuaciones que comprometen su dignidad y su moral así como su integridad física.
3.- Responsabilidad en la provisión y mantenimiento familiar
Ante la situación económica difícil que experimenta el mundo, se ha generalizado la práctica del trabajo tanto del esposo como de la esposo. Sin embargo el principio original es que fuera el hombre el encargado de la provisión y la mujer quien estuviera encargada del mantenimiento de la casa, lo que implica el cuidado de los hijos.
A primera vista puede parecer una actitud machista, pero en absoluto. Considere usted los problemas de los niños y jóvenes de hoy que no tienen una madre a quien acudir, porque ella junto con el padre llegan agotados en la noche con el indeclinable propósito de descansar.
Un pasaje muy importante para reflexionar es Génesis 3:16-19. Allí descubrimos claramente definido el papel de la mujer, la cual estaría sujeta a la autoridad del esposo mientras que el hombre, de acuerdo con el pasaje, queda asignado con la tarea de proveer para su familia
Lecturas Devocionales.
Lunes: Jer. 3:6-25
Martes: Jer. 7:1-20
Miércoles: Jer. 7:21-34
Jueves: Jer. 30:1-24
Viernes: Zac. 1:7-17
Sábado: Mal. 3:6-12
Domingo: Mat. 5:1-12.
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03 La familia ante los problemas
04 El esposo y la esposa, sus roles
06 Pilares del liderazgo del esposo
07 La esposa en el temor del Señor
09 Enojarse es normal, pero ...
10 Luchando por un mismo ideal
11 La pareja: cincuenta y cincuenta
12 La meta: fortalecer y salvar
14 Conflictos al interior del matrimonio
17 La insensibilidad de tu pareja
18 ¡Escuche y Hágase escuchar!
19 ¡Contribuya al cambio! (Parte 1)
20 ¡Contribuya al cambio! (Parte 2)
21 El valor de las "pequeñas cosas"
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